Los anabolizantes son análogos sintéticos de la testosterona. Son sustancias que favorecen la pérdida de grasa y el aumento de la masa muscular. Su consumo prolongado tiene un efecto directo sobre la fertilidad masculina y femenina.
Esteroides anabólicos y fertilidad masculina
La testosterona es la hormona que se produce a nivel testicular, y estimula la producción de espermatozoides. El aumento de testosterona por la toma de anabolizantes, provoca una alteración en la función testicular, reduciendo el volumen del mismo y el número de espermatozoides. El consumo prolongado de esteroides de este tipo, llega en ocasiones a provocar azoospermia o ausencia total de espermatozoides en el eyaculado.
Esta infertilidad derivada del consumo de anabolizantes en el hombre podría ser reversible. Dependerá del tiempo de consumo y la forma en la que se han administrado los esteroides: oral, parenteral o ambas.
Para la recuperación de la fertilidad es necesario el abandono completo de estos fármacos. Según estudios realizados, en el 60 por ciento de los casos, tras abandonar el consumo, se recupera la normalidad en el recuento de espermatozoides. El tiempo de recuperación suele ser entre 6 y 9 meses tras suspenderlos.
Anabolizantes y fertilidad femenina
La toma de andrógenos artificiales en la mujer produce:
- Alteraciones del ciclo menstrual, con tendencia a alargar los periodos entre reglas, bloquean la ovulación y pueden causar ausencia de menstruación.
- A nivel cutáneo, se manifiestan por un aumento del vello en zonas típicamente masculinas (barba, bigote…). Además, el consumo de anabolizantes puede provocar acné y calvicie, con un patrón de distribución similar al del varón.
- A nivel cardiovascular, implica un mayor daño del endotelio vascular y mayor susceptibilidad a enfermedades trombóticas. La alteración del perfil lipídico asociada a anabolizantes contribuye a incrementar el riesgo de infarto y enfermedad cardiovascular.
- Alteración de la voz, masculinización del hábito constitucional, y afecta al crecimiento en la adolescencia.
En lo que afecta a fertilidad, el consumo de anabolizantes puede provocar infertilidad en la mujer por el efecto del andrógeno en el ovario. Puede provocar anovulación y un cuadro análogo al Síndrome del Ovario Poliquístico (SOP). Su efecto puede ser reversible tras un período de tiempo sin su consumo.
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