El endometrio, tejido que recubre el interior del útero, hace la labor de “cama” o “cuna” que acogerá a los embriones durante el proceso de implantación.
¿Qué es el grosor endometrial?
Durante el proceso de implantación embrionaria, el embrión encuentra en un primer momento “su lugar” dentro de la cavidad endometrial. Este proceso es conocido como la aposición.
Más tarde, entra en contacto con el endometrio en el proceso de adhesión, y por último, se produce la invasión del trofoblasto embrionario.
¿Por qué es importante?
Sabemos que es de vital importancia que el endometrio se encuentre bien preparado para que sea posible el embarazo. Para esto las hormonas sexuales (estradiol y progesterona) actúan preparando el endometrio para que éste se encuentre en su periodo de de máxima receptividad.
Por ello, en los ciclos de tratamiento de reproducción siempre le hemos dado una gran importancia al aspecto endometrial, y buscamos una adecuada preparación utilizando hormonas exógenas (estrógenos y progesterona) o utilizando el propio ciclo ovulatorio de la mujer para conseguir un endometrio óptimo para realizar la transferencia embrionaria.
Causas de un endometrio fino
Hay determinados casos en los que es muy difícil conseguir que el endometrio tenga el grosor adecuado.
Existen patologías como sinequias uterinas (son como adherencias en el interior del útero), cirugías uterinas previas o déficits hormonales que se manifiestan con una incapacidad para lograr superar los 7mm de grosor endometrial, ocasionando numerosas cancelaciones a la hora de programar la transferencia.
Grosor endometrial y transferencia
Tradicionalmente hemos considerado como óptimo aquel endometrio con aspecto ecográfico en “triple línea” y con un grosor entre los 7 y los 14mm.
La buena noticia es que recientemente se ha publicado un estudio que encuentra tasas de embarazos aceptables en los diferentes espesores endometriales por encima de los 5mm. Esto puede suponer un importante cambio en la práctica clínica habitual, así como en los tiempos y las cancelaciones en los tratamientos de reproducción asistida.
De manera que el grosor endometrial, que tanto preocupa a nuestras pacientes con endometriosis o patologías uterinas, puede no ser tan importante como hasta ahora pensábamos, consiguiéndose unos aceptables porcentajes de embarazo por encima de los 5mm de espesor.
Consejos para mejorar el grosor endometrial
Para esas mujeres con deseo gestacional o de cara a mejorar la preparación endometrial solemos recomendar unas pautas básicas en su vida diaria:
- Seguir una dieta equilibrada con alto contenido en fibra y bajo en hidratos; ingerir alimentos ricos en antioxidantes, presentes en tomates, frutos secos o espinacas; y en vitaminas B, como huevos, espinacas o dátiles. Reducir o eliminar el café y otros estimulantes.
- Descansar porque el sueño favorece el equilibrio de las hormonas reproductivas.
- Hacer ejercicio moderado, como andar 30 minutos al día, o practicar natación, yoga o pilates.
Estos consejos son generales, debiendo seguir siempre la pauta marcada por el médico especialista.
Por favor podrías añadir la bibliografía de lo señalado en el post relativo al estudio realizado que encuentra similares tasas de embarazos en los diferentes espesores endometriales por encima de los 5mm.