Antes de iniciar un tratamiento de reproducción asistida en una pareja heterosexual se realizan estudios de fertilidad tanto al hombre como a la mujer. En los resultados de esos “packs” de pruebas de fertilidad para el hombre puede aparecer una infección seminal.
¿Qué es una infección en el líquido seminal?
La infección en el líquido seminal la definimos como la presencia de gérmenes patógenos en alguna localización del aparato reproductor masculino y/o urinario. Por lo tanto, la infección de líquido seminal puede encontrarse en el semen, pudiendo ocasionar alteraciones en la fertilidad del hombre.
Causas de las infecciones seminales
La presencia de gérmenes patógenos en la próstata, las vesículas seminales, los conductos deferentes, el epidídimo y los testículos originarán estas infecciones del líquido seminal.
Una de las causas habituales de estas infecciones en el líquido seminal es las relaciones sexuales sin protección y/o con múltiples parejas. También una infección en la vía urinaria o en la próstata podrían extenderse y provocar infección en el líquido seminal.
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Infección seminal y fertilidad masculina: ¿Es posible el embarazo?
La infección del líquido seminal puede afectar a la fertilidad masculina a través de varios mecanismos, aislados o conjuntos, que describimos a continuación:
- Obstrucción de la vía seminal, impidiendo por tanto la salida espermática habitual.
- Inflamación del testículo (orquitis), lo que puede alterar tanto la producción como la maduración espermática.
- Efectos directos de los gérmenes sobre los espermatozoides, pudiendo afectar a su concentración, movilidad, morfología y funcionalidad del semen.
- Destrucción de los espermatozoides.
- Disfunción de la próstata (el líquido prostático es necesario para la movilidad y supervivencia de los espermatozoides) y epidídimos (alteración de la maduración espermática).
- Formación de Anticuerpos anti-espermatozoides.
- Producción de radicales libres de oxígeno (ROS) que alteran la membrana espermática y a la integridad del ADN espermático.
En definitiva, dada la posible dificultad en conseguir embarazo ante la presencia de una infección seminal, es conveniente que se identifique la causa de la infección del líquido seminal para tratarla antes de iniciar el tratamiento de reproducción asistida, ya sea por Inseminación artificial (IA), por Fecundación in vitro (FIV) u Ovodonación.
En Ginemed somos expertos en fertilidad masculina, también conocida como fertilidad factor masculino.
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