¿Cuáles son los orígenes de los problemas de fertilidad?

Las causas de infertilidad pueden radicar en la mujer, el hombre, en ambos y, en ocasiones, el origen puede ser desconocido.

Actualmente, en torno a 1 de cada 6 parejas españolas sufren problemas de infertilidad. Las causas pueden ser femeninas (35-40%), masculinas (30%), mixtas (20%) y, en algunas ocasiones, el origen es desconocido (10-15%).

Origen de la infertilidad

Se entiende por esterilidad a la incapacidad de una pareja para conseguir gestación clínica después de 12 meses de relaciones sexuales sin protección. Distinguimos entre esterilidad primaria, cuando afecta a parejas que nunca han conseguido una gestación; y secundaria, cuando tras una gestación han pasado más de uno o dos años sin conseguir nuevo embarazo.

La infertilidad se refiere a no lograr embarazos a término como, por ejemplo, en el caso de mujeres con abortos de repetición. Igualmente puede ser infertilidad primaria o secundaria, según ocurra sin embarazo previo o tras un embarazo.

En España, 1 de cada 6 parejas presentan algunos de los problemas descritos, lo que supone un 15-20% del total de las parejas en edad reproductiva. Cabe destacar el hecho del retraso en la maternidad (actualmente la media de edad de primer embarazo es a los 35 años);  y solo por ello, se reducen las posibilidades fértiles de las parejas.

¿Cuándo deberíamos consultar?

Por lo general, se recomienda acudir a una clínica de fertilidad cuando se lleva un año de búsqueda de embarazo sin conseguirlo. No obstante, hay muchos factores que se deben tener en cuenta por su relación con la fertilidad y que deben ser evaluados correctamente:

• La edad. Especialmente si la mujer tiene más de 35 años.
• Tratamientos previos que puedan comprometer la fertilidad: tratamientos para cáncer o enfermedades autoinmunitarias.
• Antecedentes familiares de personas que hayan tenido menopausia siendo muy jóvenes o que hayan necesitado tratamientos de reproducción asistida.
• Si presenta problemas ginecológicos como Endometriosis o Síndrome de Ovarios Poliquísticos.

En todos estos casos, se recomienda no demorar la consulta pasados más de seis meses buscando gestación sin conseguirlo.

Por supuesto, si se trata de una familia homoparental o monoparental, si hay un diagnóstico de endometriosis, una enfermedad autoinmunitaria o un cáncer, es conveniente consultarlo con un especialista para valorar la opción que más se adapte a cada caso concreto.

Causas de infertilidad femenina

El 35-40% de las ocasiones se diagnostica una causa femenina, el 30% masculina, el 20% mixta y entre el 10-15% son de origen ideopático o desconocido. Entre las causas de infertilidad en las mujeres podemos diferenciar:

• Ováricas. La edad influye sobre la reserva ovárica y la calidad ovocitaria, y es el principal factor determinante en las técnicas de reproducción asistida. La reserva ovárica se evalúa mediante analítica de hormonas y recuento de folículos antrales mediante control ecográfico. Es necesario descartar disfunción ovárica como la anovulación, causada por diferentes factores como el ovario poliquístico, hiperprolactinemia, problemas tiroideos y problemas en el peso. Otra patología que afecta a la reproducción es la endometriosis, que de manera más frecuente se presenta como quistes endometriósicos en los ovarios.
• Tubáricas. Es fundamental comprobar la permeabilidad tubárica para conseguir gestación mediante coito o con inseminación artificial (IA). Para ello, la prueba de elección es la histerosalpingografía.
• Uterinas. Cabe descartar las malformaciones uterinas y otras anomalías uterinas como miomas o pólipos. Para ello, se utiliza la ecografía ginecológica y, en algunos casos, la histeroscopia. Otra patología importante a nivel de subfertilidad son las alteraciones en el endometrio (endometritis aguda o crónica).
• Genéticas. Principalmente relacionadas al cromosoma X (Síndrome de Turner, X frágil), o con alteraciones estructurales en los cromosomas autosomas (como traslocaciones). La prueba indicada para el estudio es el cariotipo.
• Otras causas. Endocrinas, inmunológicas, hematológicas, etc.

Es importante realizar una adecuada historia clínica mediante anamnesis y exploración física, y tener en cuenta posibles patologías no ginecológicas con repercusión reproductiva como, por ejemplo, el consumo de medicamentos, el alcohol, el tabaco y el sobrepeso (índice de masa corporal).

Causas de la infertilidad masculina

En cuanto al varón, las principales causas de infertilidad masculina radican en alteraciones en uno o varios parámetros del semen:

• Alteraciones del semen. Algunos problemas hormonales, anatómicos, inmunitarios e, incluso, ambientales, pueden derivar en una carencia de espermatozoides y otros trastornos. Tras determinar la concentración de espermatozoides, su movilidad, su forma y su vitalidad, el diagnóstico puede ser: Azoospermia, Oligozoospermia, Astenozoospermia, Teratozoospermia.
• Obstructivas. Cualquier obstrucción de los conductos espermáticos, del conducto eyaculador o de la uretra puede impedir la eyaculación del semen, una causa habitual de infertilidad.
• Genéticas. Cuando encontramos deficiencias en los conductos deferentes, microdelecciones o el paciente presenta el síndrome de Klinefelter.
• Varicocele. Presencia de varices en el escroto que aumentan la temperatura en los testículos, debilitando en semen y afectando a la producción de espermatozoides.
• Otros. Trastornos hormonales, edad, peso, eyaculación retrógrada, vasectomía o testículos no descendidos (criptorquidia).

Para ello, se debe realizar un estudio exhaustivo mediante Seminograma, que nos permite detectar alteraciones en el volumen, la concentración, la movilidad y/o la morfología de los espermatozoides con respecto a valores recomendados de la OMS 2010.

Por su parte, existen otros estudios que nos permiten estudiar las causas de la infertilidad masculina, como son: test de FISH, test de fragmentación, cariotipo, estudio de fibrosis quística, etc. que se solicitan en función de cada caso.

Soluciones

Aunque cada vez se detecten más casos de infertilidad en el hombre y en la mujer, los tratamientos actuales han avanzado mucho en los últimos años. Por ello, en función del diagnóstico, realizaremos el mejor tratamiento para cada caso concreto, intentando conseguir la gestación en el menor tiempo posible. Las opciones reproductivas en caso de infertilidad son:

• Inseminación artificial.
• Fecundación in vitro- FIV.
• Donación de gametos (óvulos y espermatozoides, conocidas como ovodonación y doble donación).

Hay que tener muy presente que el estudio de cada caso siempre debe de ser individualizado y personalizado, lo que mejorará el resultado del tratamiento de fertilidad.

Asimismo, Es importante realizar prevención primaria en la sociedad sobre el efecto de la edad en la reproducción, especialmente en la mujer antes de los 35 años.