¿Es posible cuidar mi fertilidad con el paso del tiempo?

Los hábitos de vida son un factor muy importante tanto en la salud general como en la salud reproductiva y la fertilidad de la mujer y del hombre.

¿Cómo puedo cuidar mi fertilidad?

No querer ser madre todavía, no significa no querer ser madre. Por este motivo, es importante disponer de la información sobre el estado de tu fertilidad para así poder tomar decisiones informadas:

• Revisa tu fertilidad todos los años con una simple analítica de sangre y una ecografía.

• Cuida los hábitos que afectan negativamente a tu fertilidad.
• Ten presente las patologías asociadas a la infertilidad: endometriosis, SOP, antecedentes de menopausia precoz…

Cuidar la fertilidad no es tarea fácil, depende de muchos factores. Sin embargo, adoptando algunos hábitos saludables que os explicamos a continuación, podemos lograr mejorar la fertilidad y nuestra salud en general.

Consejos para cuidar la fertilidad femenina

La edad es un factor clave para la fertilidad femenina. A partir de los 35 años nuestra reserva ovárica puede disminuir hasta un 50%, a la vez que aumentan las alteraciones cromosómicas y los abortos.

Puedes seguir los siguientes consejos para cuidar tu fertilidad:

• Cuida tu alimentación: es fundamental tener una dieta sana y equilibrada.
  • Consume alimentos con alto contenido de antioxidantes (frutas, verduras) y los que contienen Omega-3 (AOVE, aguacate, nueces, pescados azules etc.).
  • Evita los alimentos elaborados con harina refinada (aumentan los niveles de insulina y pueden interferir en la ovulación).
  • Limita el consumo de café.
• Evita el tabaco y el alcohol: pueden disminuir la fertilidad, y aumentan la tasa de abortos y complicaciones durante el embarazo.
• En caso de tomar medicamentos, consulta con tu médico si pueden interferir en la fertilidad para buscar alternativas si fuese necesario.
• Controla tu peso: tanto la obesidad como un peso excesivamente bajo pueden ser perjudiciales para concebir. La obesidad además está asociada a un mayor riesgo de hipertensión, diabetes gestacional, etc.
• Intenta llevar una vida relajada y sin estrés: el estrés puede interferir en las hormonas femeninas (aumenta niveles de prolactina, y disminuye los de gonadotropinas) y así influir en la ovulación. Se sabe que en mujeres que sufren estrés y ansiedad, las tasas de embarazo bajan a la vez que aumenta el riesgo de tener un aborto.
• Practica deporte con moderación.
• Realiza tus revisiones ginecológicas anuales. En caso de que lleves un año buscando embarazo sin éxito, consúltalo con tu ginecólogo.

Ahora, gracias a las avanzadas técnicas de criopreservación, la ciencia hace posible que podamos preservar la fertilidad sin que el paso del tiempo corra en nuestra contra

Recomendaciones para cuidar la fertilidad masculina

La fertilidad es cosa de dos. Un 30% de los casos de infertilidad son debidos a problemas masculinos.

• Cuida tu alimentación: consume alimentos ricos en Omega-3 y toma antioxidantes.
• Controla tu peso: la obesidad provoca una disminución del número de espermatozoides.
• Haz ejercicio físico: evita el ciclismo y la hípica, porque pueden aumentar la temperatura de los testículos, y así influir de manera negativa en la fertilidad.
• Evita el tabaco: la nicotina puede dañar al ADN de los espermatozoides y por tanto al material genético, aparte de disminuir la movilidad y el número de espermatozoides.
• Evita el alcohol: puede bajar los valores de testosterona. No tomes drogas y evita los esteroides anabólicos.
• Controla el estrés, descansa adecuadamente.
• Evita el uso de ropa interior ajustada: que puede aumentar la temperatura de la bolsa escrotal y así empeorar la calidad seminal.

Hasta un 50% de los varones en edad fértil tienen una calidad seminal inferior a los valores normales que propone la OMS (Organización Mundial de la Salud).